RETORNO A LA MUERTE EN VIDA, LA VUELTA A CASA

Reyes, 1999

Con el corazón dormido
no alcanza la vista
y con las manos hacia el cielo
entre nubes y flores de amarillo azafrino
bañadas por el sol, bañadas por la luz.
Cuando el hombre habla con Dios
una grande se desata
Cuando la tierra me amamanta
mi corazón vuelve a casa
Mira rama pide agua
que tus hojas tienen sed,
que el sol que las calienta
a mi hijo hacen crecer
La mirada se me pierde
cuando me voy hacia dentro
y no tengo palabras, solo el silencio
pero te escucho hermano
y contigo aprendo que una grandilocuente
vida que no entiendo
se pronuncia con las armas
y tiembla la tierra como tiemblan mis piernas.
Yo vuelvo al útero
donde reconozco a mi padre
antes de tener un nombre
de apellido Miedo
Yo parto en este viaje sin equipaje,
dejo los ojos que miran fuera
deslumbrados de ilusión
dejo la piel que da forma a mi cuerpo
y mis piernas que ya no han de llevarme
a ningún lado y
cuando llegue descansaré
y volveré a mis ojos
que mirarán tranquilos
al niño sano que al niño enfermo
porque verán lo mismo
a Dios en todas las cosas.